El dolor de espalda es una causa de sufrimiento muy frecuente. De acuerdo con la Arthritis Foundation, el 40% de las visitas a los neurocirujanos y ortopedas se debe a esta causa. Muchas lumbalgias se deben a las fuerzas que se ejercen sobre la columna lumbar a través de ciertos movimientos o incluso por malas posturas durante tiempo prolongado.
El dolor lumbar abarca desde la última costilla hasta los pliegues glúteos y puede acompañarse de dolor y/o calambres o adormecimientos en las piernas.
De acuerdo con la duración, la lumbalgia se clasifica en:
– Aguda: de inicio súbito y duración menor de 6 semanas.
– Subaguda: la cual tiene una duración de 6 a 12 semanas.
– Crónica: de duración mayor a 12 semanas.
La lumbalgia crónica recidivante es aquella en la que se presentan episodios repetitivos del dolor.
La lumbalgia mecánica simple es la más común y se caracteriza por la alteración estructural, ya sea reducción del espacio del disco intervertebral, compresión de las raíces nerviosas, lesión ósea o articular.
Cuando hablamos de radiculopatía lumbar hacemos referencia a una enfermedad caracterizada por un intenso dolor producido como consecuencia de una lesión, compresión o inflamación del nervio espinal, el cual se sitúa en la parte más baja de la espalda.
REVISTA MEDICA DE COSTA RICA Y CENTROAMERICA LXXI (611) 447 – 454, 2014
Revista Española de Reumatología, Vol. 29. Núm. 10, páginas 483-488 (Diciembre 2002)